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SEPA

13 min

SEPA: sistema de pagos europeo y su aplicación en empresas

El sistema SEPA (Zona Única de Pagos en Euros) permite realizar pagos y cobros en euros en toda la Unión Europea y países adheridos con las mismas condiciones que una operación nacional. Su objetivo es unificar y simplificar las transacciones bancarias entre empresas, autónomos y particulares dentro del espacio europeo.

Gracias a este sistema, una pyme en España puede pagar a un proveedor en Alemania o cobrar a un cliente en Francia sin comisiones internacionales ni retrasos.
Este marco común reduce costes, mejora la seguridad y estandariza formatos como el IBAN, BIC y los ficheros XML (ISO 20022).

Respuesta rápida:
SEPA significa Single Euro Payments Area. Cubre transferencias (SCT), adeudos directos (SDD) y pagos instantáneos (SCT Inst).
Su uso es obligatorio para todas las operaciones en euros dentro del Espacio Económico Europeo, y su cumplimiento está regulado por el Reglamento (UE) 260/2012.

¿Por qué el sistema SEPA es clave para pymes y autónomos?

Para una pyme o autónomo, simplificar los cobros y pagos es fundamental. Antes de este sistema, las transferencias internacionales en euros implicaban comisiones, retrasos y trámites adicionales.
Hoy, una transferencia bancaria SEPA cuesta lo mismo que una nacional y llega en un máximo de un día hábil.

Ventajas principales:

  • Estandarización de transferencias y adeudos en toda Europa.
  • Eliminación de costes y tiempos asociados a pagos transfronterizos.
  • Seguridad regulada por el Banco Central Europeo y el European Payments Council (EPC).
  • Compatibilidad total con los sistemas contables de gestión empresarial.

¿Cómo funciona el sistema europeo de pagos?

La Zona Única de Pagos en Euros (SEPA) agrupa a los países de la UE, el EEE y otras naciones europeas adheridas (como Reino Unido o Suiza). Su objetivo es que cualquier pago en euros funcione igual que un pago doméstico.

El flujo del sistema sigue una estructura estandarizada:

  1. El ordenante (pagador o acreedor) emite una instrucción de pago o cobro.
  2. El banco genera con los datos (IBAN, BIC, importe, referencia).
  3. La orden se transmite al banco receptor mediante la red del EPC.
  4. Se realiza la compensación y abono en cuenta.

Las operaciones se identifican con códigos ISO:

  • SCT (Credit Transfer): transferencias en euros.
  • SDD Core/B2B (Direct Debit): adeudos directos.
  • SCT Inst: transferencias inmediatas.

Tipos de instrumentos SEPA: transferencias, adeudos y pagos instantáneos

  1. Transferencia SEPA (SCT)

Permite enviar euros entre cuentas bancarias del área SEPA.
Plazo máximo: 1 día hábil.
Datos necesarios: IBAN, nombre y cantidad.
Ejemplo: una pyme española paga a su proveedor en Italia sin costes internacionales.

  1. Adeudo directo SEPA (SDD)

El acreedor inicia el cobro tras la autorización del cliente mediante un mandato SEPA.
Se usa en cobros recurrentes (cuotas, suscripciones, servicios).

Existen dos tipos adeudo directo SEPA (Core/B2B):

  • Core: para particulares y empresas.
  • B2B: exclusivo entre empresas, con plazos más rápidos y sin derecho de devolución.
  1. Transferencia inmediata SEPA / SEPA Instant

Permite enviar y recibir fondos en segundos, los 365 días del año.
Ideal para autónomos o negocios que requieren liquidez inmediata.

¿Qué es el mandato SEPA y cómo se autoriza?

El modelo de mandato SEPA es el documento por el que un cliente (deudor) autoriza al proveedor (acreedor) a cargar adeudos directos en su cuenta.
Debe conservarse firmado y archivado digital o físicamente.

Datos mínimos que debe contener:

  • Identificador de Acreedor (ICS).
  • Nombre del acreedor y del deudor.
  • IBAN y BIC del deudor.
  • Tipo de adeudo directo (Core/B2B).
  • Fecha, firma y referencia única.

Un mandato mal cumplimentado puede invalidar un cobro o provocar devoluciones.
Por ello, los sistemas contables integran plantillas automáticas con los campos requeridos por la normativa EPC Rulebook y podras descargar e imprimir el Mandato SEPA en formato PDF.

¿Qué son y cómo se generan ficheros SEPA XML?

Son archivos electrónicos que contienen órdenes agrupadas de pagos o cobros.

  • pain.001 → transferencias.
  • pain.008 → adeudos directos.

Cada fichero incluye la información de IBAN, importe, fecha de ejecución y referencias únicas.
Una vez generado, se envía al banco mediante la banca online o una API de conexión directa.

Ventajas:

  • Evita errores manuales.
  • Permite remesas masivas.
  • Facilita la conciliación bancaria automática.

Ejemplo práctico:
Una asesoría que gestiona 80 cobros mensuales genera un solo fichero XML con todas las operaciones. En minutos, el banco procesa los adeudos y actualiza las cuentas.

¿Cuáles son los plazos, derechos y devoluciones en el sistema SEPA?

Los derechos del cliente (deudor) varían según el tipo de operación:

Tipo SEPA Derecho de devolución Plazo máximo Autorización
SDD Core Hasta 8 semanas sin causa 8 semanas Mandato firmado
SDD Core (sin autorización) Hasta 13 meses 13 meses Debe probarse autorización
SDD B2B No permite devolución Mandato obligatorio
SCT No se revierte tras ejecución Orden del pagador

Consejo práctico: Mantener mandatos y justificantes archivados es clave ante reclamaciones.

¿Qué es y cuándo se necesita el Identificador de Acreedor SEPA (ICS)?

El ICS es un código alfanumérico que identifica a una empresa como emisor de adeudos directos SEPA.
Lo emite el Banco de España a solicitud del negocio o su entidad bancaria.

Importante:

  • Es obligatorio para operar adeudos domiciliados bajo el Esquema Básico (Core) (a consumidores y empresas) o el Esquema de Negocio a Negocio (B2B).
  • Se debe incluir en cada fichero XML de cobro (el mensaje ISO 20022) que se remite al banco.
  • El IAE, junto con la Referencia Única de Mandato, debe figurar en el mandato de domiciliación firmado con el deudor.

Tener el ICS activo agiliza las operaciones y garantiza trazabilidad ante cualquier devolución o auditoría.

¿Cuáles son los requisitos bancarios para operar dentro de la zona SEPA?

Para operar correctamente dentro del área, una empresa o autónomo necesita:

  • Cuenta bancaria con IBAN y BIC válidos.

Se requiere disponer de una cuenta bancaria que cumpla con los estándares internacionales de identificación. Esto incluye:

  • Código IBAN SEPA (International Bank Account Number): El número de cuenta debe estar en este formato armonizado, necesario para identificar de manera única la cuenta y el país del cliente.
  • Código BIC/SWIFT (Bank Identifier Code): Aunque su uso es cada vez menos obligatorio en muchas transacciones internas, la entidad debe seguir contando con este código para la identificación inequívoca a nivel global.

 

  • Adhesión de la Entidad Financiera

La entidad proveedora de servicios de pago (el banco) debe estar plenamente adherida al esquema común de transferencias y adeudos domiciliados en euros. Esta adhesión asegura que la entidad aplica las mismas reglas y formatos técnicos que el resto de participantes de la zona.

  • Cumplimiento del Reglamento (UE) 260/2012.

Es imprescindible el cumplimiento estricto del Reglamento (UE) n.º 260/2012. Esta legislación establece los requisitos técnicos y empresariales obligatorios para la ejecución de transferencias y adeudos domiciliados en la moneda única, garantizando la uniformidad y eficiencia de las operaciones transfronterizas.

  • Mandatos actualizados y custodiados.

Para realizar cobros recurrentes (domiciliaciones), la empresa debe asegurar una gestión impecable de las autorizaciones de pago:

  • Mandatos de Adeudo Actualizados: Las autorizaciones firmadas por los clientes (los llamados «mandatos de adeudo directo») deben estar vigentes y reflejar correctamente los datos del deudor y del acreedor.
  • Custodia de Mandatos: La empresa debe custodiar de forma segura todos los mandatos, ya que son la prueba legal de la autorización SEPA firmada de cobro y pueden ser requeridos por el banco en caso de disputa.
  • Software o ERP compatible con ficheros ISO 20022. La empresa debe utilizar un software de gestión (ERP, contabilidad, tesorería) que sea capaz de generar y procesar los ficheros de pago y cobro en el estándar ISO 20022 (XML).

¿Cómo automatizar los cobros y pagos SEPA con un software contable?

Un software contable como Contasimple puede automatizar todo el flujo:

  1. Generar mandatos SEPA con los campos exigidos por el EPC.
  2. Crear ficheros XML listos para enviar al banco.
  3. Registrar automáticamente los cobros y pagos.
  4. Conciliar los movimientos en la cuenta compatible con Zona Única de Pagos en Euros.
  5. Mantener un histórico auditable de cada operación.

Ventajas clave:

  • Reducción de errores manuales.
  • Cumplimiento normativo asegurado.
  • Ahorro de tiempo en tesorería y conciliación.
  • Control centralizado de todas las operaciones en euros.

Preguntas Frecuentes (FAQs)

¿Qué es el sistema SEPA?

Es una iniciativa europea creada para unificar los pagos en euros dentro de un mismo marco normativo. Permite realizar transferencias, adeudos directos y pagos instantáneos entre los países miembros con las mismas condiciones que a nivel nacional. Esto significa que un pago de España a Alemania se procesa igual que uno dentro del mismo país. Su base legal está en el Reglamento (UE) 260/2012 y es gestionado por el European Payments Council (EPC). Gracias a la Zona Única de Pagos en Euros, las empresas pueden cobrar y pagar con menor coste, mayor rapidez y trazabilidad. La homogeneización de IBAN y BIC simplifica los procesos bancarios y fomenta la integración económica. En la práctica, este sistema elimina barreras financieras entre países y facilita la automatización contable, algo esencial para pymes que operan internacionalmente.

¿Qué países forman parte de la zona SEPA?

La zona SEPA agrupa actualmente a los 27 países de la Unión Europea y a otras naciones del Espacio Económico Europeo: Islandia, Noruega, Liechtenstein, Suiza, Reino Unido, Andorra, Mónaco, San Marino y Ciudad del Vaticano. En total, más de 30 países forman la Zona Única de Pagos en Euros. En todos ellos se aplican las mismas normas técnicas para procesar transferencias y adeudos directos, garantizando igualdad de plazos, comisiones y derechos. Esto permite que un autónomo en España cobre a un cliente en Bélgica o pague a un proveedor portugués sin gestiones internacionales. Es un pilar clave del mercado único europeo. Además, algunos países fuera del euro admiten operaciones con este sistema en sus bancos, ampliando su alcance. En el ámbito empresarial, facilita la expansión internacional y reduce costes administrativos en operaciones transfronterizas.

¿Qué diferencia hay entre transferencia SEPA y adeudo directo SEPA?

Para entender qué es una transferencia SEPA y cómo se diferencia de un adeudo, hay que conocer los dos instrumentos principales del sistema. La transferencia SEPA (SCT) y el adeudo directo son los dos instrumentos básicos del sistema. En la transferencia SEPA, el titular de la cuenta ordena el pago al beneficiario, ideal para compras o pagos puntuales. En cambio, el adeudo directo lo inicia el acreedor con autorización del cliente mediante un mandato SEPA. Es la opción más usada en suscripciones, cuotas o facturas periódicas. La transferencia SEPA solo requiere IBAN y BIC, mientras que la orden de adeudo directo SEPA exige el mandato firmado. Ambos operan en euros y con plazos de liquidación rápidos (1–2 días). Esta diferencia es clave para elegir la opción adecuada según el control de pagos o cobros que se quiera mantener. En la práctica, muchas pymes combinan ambos métodos para equilibrar agilidad, automatización y seguridad en su flujo de tesorería.

¿Qué ocurre si un mandato SEPA caduca?

Los mandatos SEPA caducan si no se utilizan durante 36 meses consecutivos. En ese caso, el acreedor debe solicitar al cliente una nueva autorización antes de emitir nuevos adeudos directos. Si no lo hace, el banco puede rechazar el cobro y devolver la operación, generando costes y pérdida de derechos de cobro. Esta norma busca garantizar que los mandatos SEPA sigan reflejando la voluntad del cliente. La caducidad afecta tanto a mandatos en papel como electrónicos. Para evitar incidencias, las empresas deben revisar periódicamente la vigencia de sus autorizaciones. Un software contable facilita este control mediante alertas automáticas. Así, las pymes evitan devoluciones y aseguran que todos los cobros cumplan la normativa SEPA europea del Reglamento europeo 260/2012, manteniendo su gestión financiera ordenada y sin riesgos de incumplimiento.

¿Qué es SEPA Instant?

Es un servicio disponible únicamente entre cuentas de bancos adheridos al sistema SEPA, que garantiza la ejecución inmediata de las transferencias. Este sistema de transferencias inmediatas SEPA permite enviar dinero entre cuentas europeas en menos de diez segundos, los 365 días del año. No requiere gestiones adicionales y, en la mayoría de los bancos, no tiene coste extra. Este servicio está disponible para importes de hasta 100.000 € por operación, aunque cada entidad define su límite. Para las pymes, este tipo de transferías representa una herramienta de liquidez esencial: permite pagar proveedores urgentes o recibir ingresos sin esperar días hábiles. Por ejemplo, una tienda online puede liberar un pedido tan pronto como el pago se confirme, mejorando su servicio y su tesorería. Con su adopción creciente en Europa, las transferías Instant se está convirtiendo en el nuevo estándar de rapidez y eficiencia bancaria. Su integración con softwares contables permite registrar automáticamente las operaciones en tiempo real.

¿Qué ventajas tiene SEPA para empresas y pymes?

El sistema SEPA ofrece grandes beneficios para las empresas que operan dentro de la Zona Única de Pagos en Euros. Unifica la operativa bancaria, elimina comisiones por transferencias internacionales en euros y agiliza los cobros y pagos. También permite automatizar procesos mediante adeudos directos SEPA, reduciendo tareas administrativas y errores. Además, domiciliación de pagos SEPA mejora la trazabilidad de las transacciones, facilita la conciliación contable y refuerza la seguridad jurídica al estar respaldado por el Reglamento (UE) 260/2012. Para una pyme, esto significa menos fricción operativa, menor dependencia de bancos locales y una visión más clara de su tesorería. La estandarización de formatos como la remesa SEPA XML y la adopción de transferencias Instant hacen que las empresas sean más ágiles, competitivas y eficientes. En definitiva, todos los cobros se realizan mediante domiciliación bancaria bajo normativa SEPA, lo que garantiza seguridad, trazabilidad y cumplimiento regulatorio.

¿Qué derechos tiene el cliente ante un cobro SEPA?

El sistema SEPA garantiza al cliente una protección sólida frente a cargos indebidos. En el esquema SEPA Core, el deudor puede solicitar la devolución del adeudo sin motivo dentro de un plazo de 8 semanas desde la fecha del cargo. Si el mandato no fue autorizado o no existe, el plazo se amplía hasta 13 meses. En el esquema B2B, reservado a operaciones entre empresas, el derecho de devolución desaparece una vez ejecutado el cobro, salvo error técnico. Los bancos, además, deben verificar la validez del mandato de domiciliación SEPA y comprobar que el Identificador de Acreedor SEPA (ICS) sea correcto. Por ello, conservar los mandatos firmados y actualizados es clave para evitar disputas. Estos derechos están recogidos en la normativa SEPA europea, que armoniza la protección de usuarios en todos los países del área.

¿Qué diferencia hay entre SEPA y las transferencias internacionales SWIFT?

Aunque ambos sistemas permiten mover dinero entre países, SEPA y SWIFT funcionan de forma muy distinta. SEPA solo opera en euros y dentro de los países de la Zona Única de Pagos en Euros, aplicando las mismas comisiones y plazos que un pago nacional. En cambio, SWIFT es una red global que procesa transferencias en múltiples divisas y fuera de Europa, con costes y tiempos variables. Una transferencia SEPA suele tardar un día hábil y no tiene comisiones adicionales, mientras que una transferencia SWIFT puede tardar entre dos y cinco días y generar gastos intermedios. Para las pymes que operan dentro de Europa, SEPA es la opción más eficiente, rápida y transparente. SWIFT, en cambio, sigue siendo útil para pagos en dólares, libras o fuera del espacio europeo. Entender esta diferencia evita errores y costes innecesarios en las operaciones internacionales.

¿Cómo ayuda un software contable a operar bajo SEPA?

Permite a las empresas gestionar pagos y cobros de forma automatizada y conforme al Reglamento europeo 260/2012. Estas plataformas crean mandatos SEPA, generan ficheros SEPA XML (pain.001 y pain.008) compatibles con todos los bancos y registran automáticamente los movimientos contables. También gestionan devoluciones, controlan plazos de caducidad y concilian las operaciones con la cuenta bancaria. En herramientas como Contasimple, todo el flujo —desde la factura hasta el adeudo o la transferencia— se ejecuta de forma sincronizada. Estas herramientas funcionan con cualquier cuenta compatible con SEPA. Esto reduce errores, ahorra tiempo administrativo y mejora el control financiero. Para autónomos y pymes, la integración del sistema en su contabilidad supone una ventaja estratégica: unifica la tesorería europea, garantiza cumplimiento legal y facilita la planificación financiera mediante informes actualizados en tiempo real.

¿Qué diferencia hay entre SEPA y las transferencias internacionales SWIFT?

Aunque ambos sistemas permiten mover dinero entre países, SEPA y SWIFT funcionan de forma muy distinta. SEPA solo opera en euros y dentro de los países de la Zona Única de Pagos en Euros, aplicando las mismas comisiones y plazos que un pago nacional. En cambio, SWIFT es una red global que procesa transferencias en múltiples divisas y fuera de Europa, con costes y tiempos variables. Una transferencia bancaria SEPA suele tardar un día hábil y no tiene comisiones adicionales, mientras que una transferencia SWIFT puede tardar entre dos y cinco días y generar gastos intermedios. Para las pymes que operan dentro de Europa, SEPA es la opción más eficiente, rápida y transparente. SWIFT, en cambio, sigue siendo útil para pagos en dólares, libras o fuera del espacio europeo. Entender esta diferencia evita errores y costes innecesarios en las operaciones internacionales.