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Contratos y acuerdos: cómo proteger tus intereses como autónomo

Publicado el 15 de abril, 2025

9 min

¿Cuáles son los tipos de contratos relevantes para autónomos?

Reconocer la trascendencia de establecer contratos y acuerdos sólidos es vital para los trabajadores por cuenta propia. Al abordar un contrato de trabajo, la definición clara de responsabilidades y derechos es la base para poder alcanzar una colaboración fructífera.

En el ámbito de los intereses laborales, un contrato bien redactado proporciona seguridad y certeza a ambas partes, por ejemplo, en el caso de un usuario que subcontrata servicios. Un acuerdo sólido es aquel que define funciones, plazos y condiciones de pago, y protege los intereses financieros. Además, en el documento se pueden incluir cláusulas de confidencialidad. Sin duda, este es el mejor modo de resguardar información sensible y preservar la integridad comercial del autónomo.

Asimismo, hay que considerar la normativa legal en los acuerdos laborales entre autónomos. Más aún, en los acuerdos de interés profesional para aquellos que dedican la mayoría de sus trabajos a una misma empresa. En este caso, la importancia de las cláusulas redactadas es crucial. Un ejemplo práctico de utilidad radica en cómo se aborda la flexibilidad; tanto en los horarios como en las condiciones de modo, tiempo y lugar de los servicios que se van a llevar a cabo. Firmar un mal acuerdo solo tiene un perdedor: el trabajador.

Tipos de contrato:

Uno de los más destacados es el contrato de colaboración: un acuerdo escrito que se firma entre dos o más autónomos. En él se establecen las bases y condiciones bajo las cuales deciden unirse para realizar un proyecto o una actividad comercial común. Aquí, cada uno mantiene su independencia y autonomía, pero se comparten funciones, responsabilidades, pérdidas o beneficios. Es decir, a través de la colaboración, se ayudan en equipo para alcanzar objetivos específicos, aunque no exista una relación de subordinación entre ellos.En cambio, a nivel oficial, la reforma del Gobierno de 2022 ha actualizado los tipos de contratos laborales que se pueden hacer en la actualidad. Así, tras su aprobación, para la contratación de empleados hay principalmente cuatro modelos:

  • Indefinidos. También conocido como contrato de trabajo fijo, sin fecha señalada en su duración, finaliza cuando el empresario o el contratado lo consideren oportuno. Eso sí, como puede ser a tiempo parcial o completo, un autónomo puede contratar a un empleado durante media jornada.
  • Fijos discontinuos. Con las condiciones anteriores, su particularidad es que no se trabaja todo el año. Está dirigido a los trabajadores de los negocios que operan de manera estacional una época concreta del año.
  • Contratos temporales. En estos, la fecha de finalización siempre tiene que estar justificada. Dos ejemplos son los contratos de sustitución o los habitualmente utilizados por circunstancias de producción. Se pueden ir prorrogando, pero al llegar a los 18 meses es obligatorio que pasen a ser indefinidos.
  • Formativos. Están pensados principalmente para los estudiantes o para las personas sin experiencia en un determinado sector profesional. Los empleados adquieren formación al mismo tiempo que reciben un salario.

Contratos laborales, acuerdos de servicio y otros documentos legales esenciales

Entre todos los tipos de contratos para autónomos, tal vez el más relevante sea el contrato de prestación de servicios. Se trata de un modelo que, de alguna manera, protege al trabajador independiente en el desarrollo de su labor. Conviene decir que no se rige por el derecho laboral, sino por el Código de Comercio. Sin embargo, tal y como ocurre con el resto de los contratos laborales, tiene la misma finalidad.

Con la prestación, aunque muchos no conozcan en detalle los acuerdos laborales entre autónomos, puedes pedir a los clientes firmar un documento. En él se garantizan diferentes condiciones y un añadido de especial valor: amparo frente a posibles impagos.

No es obligatorio, pero si muy recomendable para muchas transacciones comerciales, sobre todo en acuerdos de servicio de larga duración, con clientes desconocidos o con aquellos que intuyas que puede haber algún problema. Desde una reparación en un taller mecánico hasta el diseño web de un informático independiente, sirve para todo tipo de operaciones.

Por otra parte, más allá de las políticas de recursos humanos, siempre es muy importante disponer de documentos legales que acrediten un intercambio comercial. Más aún, dejar claro y por escrito cuándo, cuánto y cómo se abona el servicio. De igual modo, qué materiales se emplean o la fecha de entrega del producto. Recuérdalo, porque es un respaldo esencial tanto para el profesional como para el cliente.

Asesoramiento legal y consulta profesional

La búsqueda de asesoramiento legal y consulta profesional es imprescindible en la gestión del autónomo, especialmente en el contexto de la contratación de empleados y a la hora de redactar y definir cuál es el contrato de trabajo idóneo.

Al embarcarse en este proceso, el asesoramiento legal proporciona orientación sobre las complejidades normativas. Es más, puedes adaptarlo a las necesidades específicas del negocio. Este enfoque proactivo no solo resguarda tus intereses laborales, sino que también establece cimientos sólidos para tener mejores relaciones empresariales.

De igual modo, la consulta profesional en el ámbito legal se extiende más allá de la mera formalización de acuerdos. Implica comprender a fondo las dinámicas del entorno laboral y las expectativas tanto del patrón como de los empleados. Al integrar este conocimiento en el proceso de contratación, consigues optimizar la armonía en el equipo y prevenir disputas laborales. Sin duda, ambos objetivos son muy importantes en el devenir de cualquier negocio.

La importancia de buscar asesoramiento legal para la redacción y revisión de contratos

La importancia de buscar asesoramiento legal en la redacción y revisión de contratos de trabajo se manifiesta especialmente en tres apartados:

  • la implementación de políticas de recursos humanos
  • la contratación de empleados
  • la gestión de los derechos y obligaciones del autónomo

El asesoramiento garantiza que cualquier acuerdo esté alineado con las normativas vigentes, proporcionando así un marco sólido para futuros procesos de contratación. Precisamente, ese riguroso cumplimiento con los requisitos legales es el que otorga máxima importancia a la asesoría externa especializada.

Igual ocurre al hacer referencia a los acuerdos laborales entre autónomos. Aquí, la orientación jurídica asegura que los términos y condiciones sean claros y justos para todas las partes. Esto evita malentendidos y conflictos futuros, además de establecer una base sólida para colaboraciones fructíferas venideras.

Cláusulas de protección y resolución de disputas

¿Un autónomo puede contratar a otras personas? Obviamente, la respuesta es sí, pero con un matiz. Todo depende del número de empleados que tenga a su cargo y de la naturaleza de los contratos laborales dependientes de su actividad.

Es importante reseñarlo, porque las cláusulas de protección que establezca una micropyme tienen mucho que ver con las políticas de recursos humanos. Por ejemplo, una pequeña tienda puede tener un máximo de 3 empleados; en cambio, los restaurantes de uno y dos tenedores hasta 10.

Es más, entre los tipos de contratos para autónomos hay tres opciones, que se elaboran en función de la situación de la persona elegida: puede ser otro autónomo, un empleado o un familiar. En este último caso, tiene que serlo obligatoriamente por consanguineidad, afinidad o adopción de hasta segundo grado, ser conviviente contigo o estar bajo tu cargo.

Además, la colaboración debe ser habitual y coincidir en el mismo lugar de trabajo. Todo ello conviene tenerlo muy en cuenta a la hora de resolver disputas. En estos casos, los métodos más comunes son la mediación, el arbitraje de consumo, la vía extrajudicial o, en último caso, un juicio ordinario en un juzgado laboral.

Todo esto viene a colación porque establecer las cláusulas de protección óptimas no es un tema baladí. Estas son las premisas más importantes en defensa de tus intereses laborales:

  • Especifica claramente las responsabilidades y obligaciones de las partes.
  • Incluye cláusulas de confidencialidad para proteger la información sensible.
  • Establece plazos y condiciones de pago de forma detallada.
  • Define claramente los límites y alcances del trabajo acordado.
  • Incluye cláusulas de no competencia para evitar conflictos de intereses.

En cualquiera de los distintos tipos de contratos para autónomos, incluir cláusulas de salvaguardia es esencial. Deben contener términos claros y añadir mecanismos efectivos de resolución de conflictos que avalen una solución eficiente en caso de desacuerdos.

Una de las soluciones más ágiles y sencillas para solventar litigios es el juicio verbal. Se trata de un procedimiento que se interpone en demandas cuya cuantía no exceda de 6.000 euros. Además, con la particularidad de que, si la cantidad es inferior a los 2.000 euros, no es obligatoria la intervención de un abogado ni un procurador.

En cambio, por vía judicial, las empresas pueden reclamar a través de un juicio ordinario. Aunque, para evitar pleitos, también se puede intentar realizar un acto de conciliación. Otra opción interesante es el juicio cambiario; con él se pretende cobrar un título valor que no haya sido satisfecho (letra de cambio, cheque o pagaré).

Y, por último (tal vez el más rentable para el día a día), cuentas con el juicio monitorio, pensado para combatir la morosidad. Es el que muchos utilizan para intentar recuperar deudas de cualquier importe y condición. Dinero en efectivo, importes vencidos e incluso los exigibles por derecho.

De todos modos, de manera genérica, ¿qué cláusulas puedes añadir a un contrato para resolver conflictos? Las siguientes son las más significativas:

  • Establecer un mecanismo previo de resolución de disputas a través de la mediación o el arbitraje.
  • Definir las instancias y procedimientos a seguir en caso de desacuerdo.
  • Especificar la ley aplicable para resolver controversias legales.
  • Establecer penalizaciones por incumplimiento para disuadir posibles conflictos, sobre todo si se trata de impagados.
  • Incluir una cláusula de terminación del contrato en caso de violaciones graves.

Mantenimiento y actualización de documentos legales

Por todo lo que hemos visto hasta ahora, es lógico que el mantenimiento actualizado de la documentación legal sea imprescindible. La mejor solución la encuentras en un software especializado. Así, no solo simplificas la gestión, sino que también garantizas la conformidad con las normativas vigentes. Ten en cuenta que estar al día en tecnología facilita la adaptación a nuevas regulaciones y optimiza los procesos.

De hecho, la eficiencia en la actualización de contratos, acuerdos y políticas empresariales es clave para prevenir conflictos legales y mantener un entorno laboral seguro. Invertir en tecnología otorga soluciones que ahorran tiempo y aseguran la integridad y legalidad de la documentación.

Estrategias para mantener al día los contratos y acuerdos en función de los cambios en el negocio y la legislación

Estas son las más adecuadas para los distintos tipos de contratos para autónomos:

  • Software especializado. Emplea plataformas actualizadas para gestionar contratos.
  • Alertas y recordatorios. Si estableces sistemas automáticos, se encargaran de notificarte los vencimientos y cambios legislativos.
  • Revisión regular. Siempre es conveniente programar revisiones periódicas para adaptar los acuerdos a la evolución del negocio y las leyes.
  • Formación continua. Importante: tienes que estar capacitado en las actualizaciones normativas más relevantes para poder ajustar tus documentos a los cambios legislativos.
  • Actualización eficiente. Mantener registros claros de todo tipo de convenios. Si conservas las versiones anteriores, dispondrás de un histórico muy efectivo.

Contratos, acuerdos, pactos… Cualquiera que sea el caso, las políticas de recursos humanos son siempre determinantes. Siendo así, al hablar de cómo proteger tus intereses como autónomo o pyme nos ponemos en vanguardia. Ese es precisamente nuestro principal objetivo. En Cegid Contasimple estamos a tu servicio, contáctanos.

 

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